Fentermina

Los anoréxicos, también conocidos como fármacos anorexígenos o supresores del apetito, son una clase de medicamentos que se utilizan para reducir el apetito y promover la pérdida de peso. Actúan afectando el sistema nervioso central para disminuir la sensación de hambre. Los agentes anorexígenos que actúan suprimiendo el apetito, empleados en el tratamiento de la obesidad se dividen en tres categorías: adrenérgica (Benzfetamina, Fentermina), serotoninérgica (Flenfuramina)y adrenérgica/serotoninérgica (Sibutramina). Estas drogas pueden tener diversos efectos en el cuerpo y la mente, incluidos posibles impactos en la sexualidad. A continuación se muestran algunas formas en que las drogas anoréxicas pueden afectar la sexualidad:

Efectos negativos:

  • Disminución de la libido (deseo sexual): los anoréxicos pueden provocar una disminución del deseo sexual o de la libido. La reducción del apetito que inducen estos fármacos también podría disminuir el interés general por la actividad sexual.
  • Cambios hormonales: algunos medicamentos anoréxicos pueden provocar desequilibrios hormonales que pueden afectar la salud sexual. Estos cambios hormonales pueden afectar la fertilidad y la función sexual tanto en hombres como en mujeres.
  • Efectos emocionales y psicológicos: los anoréxicos pueden tener una variedad de efectos emocionales y psicológicos, que incluyen aumento de la ansiedad, nerviosismo y alteraciones del estado de ánimo. Estos efectos emocionales y mentales pueden afectar negativamente el bienestar general, incluido el interés y el disfrute de la actividad sexual.
  • Riesgos para la salud física: el uso de anoréxicos puede tener graves riesgos para la salud, incluidos problemas cardiovasculares, presión arterial alta y problemas digestivos. Estos problemas de salud pueden afectar el bienestar físico general y potencialmente afectar la salud sexual.

Es importante tener en cuenta que un profesional de la salud debe controlar de cerca el uso de anoréxicos para perder peso o suprimir el apetito, y estos medicamentos generalmente se recetan solo para indicaciones médicas específicas. Se desaconseja enfáticamente el uso de anoréxicos con fines no médicos, como lograr una pérdida extrema de peso o alterar la apariencia, ya que puede tener efectos perjudiciales tanto para la salud física como mental.

Si le preocupa cómo los medicamentos anoréxicos están afectando su sexualidad o su salud en general, es recomendable discutir estas inquietudes con un proveedor de atención médica. Pueden evaluar si el medicamento contribuye a algún efecto secundario sexual y pueden considerar tratamientos alternativos si es necesario. Además, las personas que usan anoréxicos para bajar de peso deben consultar con un profesional de la salud para asegurarse de que su uso sea médicamente apropiado y seguro.