Female Sexual Arousal Disorder

Descripción General

Los trastornos de la excitación sexual femenina afectan la respuesta de excitación mental o genital de la mujer. A veces, una mujer con un trastorno de la excitación sexual puede sentirse excitada mentalmente, pero su cuerpo y sus genitales no pueden responder a la estimulación sexual. Otras veces, el cuerpo de una mujer puede responder a la estimulación sexual, pero puede tener dificultad para sentirse excitada durante la actividad sexual.

La excitación genital femenina es la incapacidad para desarrollar o mantener respuestas genitales adecuadas, incluida la lubricación vulvovaginal, la congestión de los genitales y la sensibilidad de los genitales, asociada con la actividad sexual y que causa angustia durante un mínimo de seis meses.

Mecanismos de Producción

Causas físicas, psicológicas o sociales, pueden causar trastorno de la excitación genital femenina o empeorar los síntomas. Una lesión vascular (relacionada con los vasos sanguíneos), una disfunción neurológica (relacionada con el sistema nervioso) o un desequilibrio o deficiencia hormonal pueden causar síntomas de trastorno de la excitación genital femenina. Algunos ejemplos de condiciones que pueden causar trastorno de la excitación genital femenina son enfermedad cardiovascular, enfermedad vascular periférica, obesidad, diabetes, trastornos de la tiroides, esclerosis múltiple (EM), estenosis de la columna, cirugías pélvicas (como histerectomía o reparación de prolapso), radioterapia pélvica y anorexia nerviosa.

El trastorno de la excitación genital femenina también puede verse afectado por factores psicológicos como la ansiedad o la distracción, factores culturales como la creencia de que es un pecado disfrutar del sexo o medicamentos como las píldoras anticonceptivas o los antidepresivos.

También a medida que las mujeres envejecen, sus niveles de hormonas reproductivas disminuyen y esto puede afectar la composición y la sensibilidad de los tejidos genitales, así como la cantidad de flujo sanguíneo a la región genital.

Diagnóstico

Muchos trastornos sexuales pueden afectar la lubricación y la sensibilidad de los genitales de una mujer. Sin embargo, una mujer puede tener trastorno de la excitación genital femenina si tiene estos síntomas, pero no tiene otra condición que pueda causar estos síntomas, como una infección, condición inflamatoria, trastorno de dolor sexual, angustia psicológica, problemas de relación o adelgazamiento significativo de los tejidos vaginales. Los síntomas más comunes de trastorno de la excitación genital femenina son:

● Dificultad para producir o mantener una lubricación natural durante las relaciones sexuales.
● Falta de congestión genital durante las relaciones sexuales.
● Falta de sensibilidad genital durante las relaciones sexuales.
● La sensación de tener genitales "muertos".
● Angustia personal o problemas de relación debido a la condición.

El historial de la paciente proporciona información básica sobre el estado del trastorno y puede proporcionar información valiosa sobre la posible causa del problema.

Tratamiento

No existe una opción de tratamiento única, y los planes de tratamiento deben personalizarse para cada paciente para abordar las diferentes causas subyacentes del trastorno de la excitación genital femenina en cada caso.

Los trastornos de la excitación a menudo se asocian con enfermedad vascular, enfermedad cardiovascular, diabetes y síndrome metabólico, por lo que los cambios en el estilo de vida, como dormir lo suficiente, mantener una dieta saludable, hacer ejercicio con regularidad y dejar de fumar, pueden ser beneficiosos en el tratamiento del trastorno de la excitación genital femenina.

Dependiendo de la causa subyacente de la condición, los cambios de comportamiento como ajustar los medicamentos (especialmente píldoras anticonceptivas o antidepresivos), participar en terapia sexual o terapia cognitivo-conductual (TCC) o practicar la atención plena o el yoga también podrían ser útiles. Para las pacientes con dolor pélvico o problemas de incontinencia (pérdida de orina o heces), la terapia del suelo pélvico es una posible opción de tratamiento.

Las pacientes con trastorno de la excitación genital femenina pueden considerar el uso de humectantes y lubricantes vaginales, vibradores o dispositivos de congestión del clítoris para ayudar con sus síntomas. Si los síntomas de trastorno de la excitación genital femenina están relacionados con las hormonas, un profesional de la salud puede recetar a la paciente un tratamiento hormonal sistémico o localizado. Se ha demostrado que las cremas hormonales locales son muy eficaces en el tratamiento de este trastorno de la excitación sexual.